lunes, 28 de octubre de 2013

SON UNOS MEDIOCRES

Cuando para dirigir personas algunos chillan, amenazan, embaucan, etc.,... el mensaje que en realidad se le está mandando al que aguanta los gritos y las amenazas es “soy un mediocre y no tengo más argumentos, ni maneras para decirte lo que hay que hacer”.

El negocio está duro, muy duro. Pero la dinámica en la que están cayendo muchos cargos directivos de la red y que asumen algunos directores y subdirectores, más por comodidad que por convencimiento, es pan para hoy y hambre para mañana.

Ni objetiva, si subjetivamente se puede pretender dirigir una plantilla con estas formas y maneras.

La esquizofrenia a la que estamos llegando nos hace llegar a tener miedo de ir a trabajar... ¿cuántos correos tendré hoy?... ¿podré vender algún piso?... ¿cuántos seguros llevo?... si cumplo los “compromisos”,... ¿cuántos más me van a pedir para la próxima semana?

Y lo que no quieren ver los mediocres... ¿cuántas comisiones tendré que “defender”? ¿cuántas quejas sobre el precio y la atención que da CASER tendré que soportar con sonrisa “profiden”? ¿cuántas peticiones de crédito rechazaré.... porque si?...¿cuántos clientes se irán despotricando por no hacerle un ingreso a las 11 de la mañana, con la oficina vacía, aunque le cobre la comisión?... vamos como para venderle un seguro mientras grita o intentar captarlo en la campaña de “no clientes”.

Y hacemos un llamamiento a la plantilla: hacer caso de las amenazas y pretender “solucionarlas” o evitarlas saltándonos a la torera leyes (el horario) y normas (la normativa interna) solo puede acarrearnos problemas de toda índole.

Problemas que “el mediocre” de turno, dirá que no sabe nada y se lavará las manos. Eso siempre qué y cuando no te pida explicaciones, a gritos, el día que decidas cumplir el horario y no saltarte las normas.

Acostumbraos a decir NO. Te sentirás bien. Te sentirás mejor. Si dices que NO a lo irracional, a las amenazas, a los gritos... ¿qué te puede pasar?

Si eres administrativo sin cargo, todo lo que te puede pasar es que trasladen a NO MAS de 25 kilómetros del destino que sirva de referencia en tu caso. ¿Cuál es este? El último que hayas aceptado voluntariamente o el que tuvieras el 09/03/96, según dice el art. 95 del Convenio Colectivo vigente. Y de ahí a 25 kms alrededor te pueden mover las veces que quieran. Pero ALREDEDOR. No pueden moverte de 25, en 25 hasta juntar 100, 150, kms. de distancia desde tu destino actual.

Tienes que imaginarte un circulo de 25 kms de radio, con el centro en tu destino de referencia. Y dentro de ese circulo te pueden mover las veces que quieran, pero DENTRO de ese circulo.

Diga lo que diga “el mediocre” de turno. Y lo que ha pasado este año con 5 compañeros (solo 5) es una excepción que para el próximo ERE amarraremos.
Y si eres administrativo con cargo: director, subdirector, gerente, gestor, etc.,.. pues todo lo que te puede pasar es que pierdan la confianza en ti y te destituyan o quieran que renuncies. Y a partir de ahí, entran en vigor los párrafos anteriores.
Cuando te planteen la destitución o la renuncia y tu creas que no tienen razones objetivas para ello recuerda unas ideas al respecto.

Te pedirán que renuncies “por tu bien”, que es mejor que destituirte. Según la normativa interna si renuncias “el mediocre” se ahorra el informe a la superioridad; si te destituye tiene que argumentarlo hacia arriba y hacia abajo. Y si renuncias, en tu expediente siempre quedará una carta tuya diciendo que has renunciado.

Aunque estés dando palmas de alegría internamente, porque haya decidido algún “mediocre” que ya no eres de su confianza, tienes que intentar hasta el último momento negociar tu situación al día siguiente. Si “el mediocre” quiere que cambies tu puesto por otro, eso lo puedes admitir. Pero nunca renuncies en blanco. Es nuestra recomendación.


Ah... y no te van a despedir porque no vayas por las tardes o no des palmas de alegría cuando “el mediocre” diga alguna tontería. Por mucho que amenace: no puede.

jueves, 10 de octubre de 2013

DESREGULACIÓN HORARIA EFECTIVA

Nos llegan constantes noticias, que no rumores, de que bastantes “descerebrados” con mando sobre la Red están incidiendo en unos mensajes en todos los territorios sobre el hecho de que la plantilla debe ir a trabajar por las tardes, si o si.

Ha habido temporadas en que este tema eran calentones de alguno, pero ahora detectamos, que a fuerza de ser en distintos sitios la “descerebración” debe estar orquestada desde las más altas instancias de la casa.

También damos por descontado que tanta crisis y tanta “flexibilidad” y tanta “modernidad”, hace que muchos trabajadores se coman muchas cosas, que no deberían comerse.

Y tampoco nos rasgamos las vestiduras si reconocemos que la gestión de RRHH, como ¿garantes? de la legalidad establecida es ¿difícil? ¿complicada? ¿parcial? Porque cuando hay que servir a “dos” amos, la Ley y la Dirección, pues eso.

Pero el convenio vigente hasta el 31/12/14 sigue diciendo que el horario de trabajo es el que todos nos sabemos; no hay necesidad de repetirlo.

Invitar, inducir, convocar, sugerir, incitar, insinuar, aguijonear, demandar, instigar, etc.,.... a los trabajadores para que prolonguen su jornada de trabajo después de las 15 horas sigue siendo ILEGAL, y cuando es con amenazas, veladas o directas, es algo peor. Y eso está pasando en iberCaja, y muchos compañeros se lo comen y la Dirección no hace nada y lo consiente, o nos tememos, lo fomenta.

Pero hoy tenemos una perla de ejemplo de lenguaje claro, al respecto de estos abusos. Es el acta de una Inspección de Trabajo, sobre una entidad financiera y del grupo “0”.

“... como resultado del conjunto de actuaciones practicadas, ha quedado acreditado, de una parte, la existencia de prolongación de jornada en las distintas sucursales visitadas, traducidas en la realización de horas extraordinarias, de otra, que en esos centros no se lleva sistema de control diario del horario de los empleados y, en consecuencia, de la jornada de trabajo prevista en el C. Colectivo de aplicación. Ello imposibilita el control y comprobación de esas horas y, con carácter singular, si se ha superado el cómputo de la jornada máxima legal de 1680 horas previstas en ese convenio art. 6.2. Se hace constar expresamente que, pese a que los empleados identificados en los centros han mantenido declaraciones coincidentes a la hora de ofrecerles carácter voluntario a esas asistencias, es lo cierto que sus trabajos se encuentran ligados a la consecución de unos objetivos, previamente marcados por la Dirección, y que éstos, según la mayoría de los consultados, no pueden alcanzarse trabajando solo por la mañana, en horario normal de la oficina”
Y esto está escrito por un inspector de trabajo ahora: no el siglo pasado. Sigue existiendo un convenio y sigue siendo válida su regulación horaria.

Puede ser que en algún caso puntual, como los que expresamente recoge el convenio, abrir en horario distinto tenga sentido: así se ha pactado. Pero pretender que se puede “obligar” a que TODA la plantilla prolongue la jornada, bajo insinuaciones o amenazas, da una idea del talante y del talento de esos “líderes de equipos”.

El resultado más inmediato de esa gestión de recursos humanos, va desde el cabreo generalizado de los que van amenazados/invitados, hasta la desmotivación y el presentismo. Ah y el aumento de la partida de gastos generales: luz, agua, consumibles, etc.,... que a alguien le debería preocupar. ¿O eso no importa?


Aquellos que quieran ir por las tardes, porque no tengan amigos, aficiones o familia, ellos sabrán. Pero que sepan lo que opina la Inspección de Trabajo y que no induzcan a los demás a perder los amigos, las aficiones o la familia, porque muchas veces el mayor problema para conseguir los objetivos es la propia Dirección y sus mensajes cruzados, cuando no contradictorios.