En esta
nuestra sacrosanta casa que es iberCaja Banco nos encontramos habitualmente con
situaciones que entristecen e indignan.
Ya hace tiempo
que no escandalizan las convocatorias de reuniones fuera de horario. Reuniones
que aportan poco valor añadido a nuestra organización, reuniones que “hay que
hacer” aunque sea para no decir nada nuevo y que, en muchos casos, solo sirven
para desmotivar.
Entre el
despropósito y la perversidad se mueve lo último que nos llega desde algunas
zonas de Madrid:
CONVOCAR FUERA DE SU
HORARIO A PERSONAS CON REDUCCIÓN DE JORNADA
Se nos llena la boca de “sensibilidad social”
entre los valores
de iberCaja, pero a la hora de la verdad...
Se dice en
la Convención de Directivos que nos
aprecian, pero a la hora de la verdad...
Sabemos que a
los directores de zona que perpetran estas ideas, la legalidad laboral se la
“refanfinfla” (ya veremos qué ocurre si existen sanciones de Inspección de
Trabajo) pero debería darles vergüenza sabiendo que una reducción de jornada es
un derecho, pero va acompañada de la subsiguiente reducción salarial.
Por otra parte, la
responsabilidad de que las cargas de trabajo por bajas o ausencias de los
empleados sean soportadas por el resto de los compañeros no recae en los
ausentes sino en esta empresa
que no cubre bajas, mucho
menos ausencias. Es hacia los responsables hacia donde debemos dirigir nuestra indignación que son los
que permiten estas situaciones.
Si, al menos, los equipos volantes tuviesen una dotación tanto cuantitativa (número de empleados asignados) como cualitativa (apoderados) y, en algunos
casos, no fueran secretarios de los directores de zona y sufrieran sus
caprichos...
No es tan difícil, pero
tiene que haber voluntad y
responsabilidad, dos cosas que nuestros directivos no tienen.
BASTA DE PALABRAS, TOMENSE EN SERIO LOS RECURSOS HUMANOS