martes, 22 de septiembre de 2015

¿ADIOS AL HORARIO?

El pasado jueves, varios sindicatos con representatividad en Bankia, CCOO, Accam (Cuadros) y SATE-CIC dieron por buena la pretensión de la Dirección de dicha entidad de dinamitar la jornada continua en 200 oficinas de su red, firmando un nefasto acuerdo que puede ser el punto de partida para la desregulación horaria de todo el sector.

En concreto, estos sindicatos dan por buena la jornada de 8:15 a 18:30 para los empleados destinados en las oficinas denominadas “Ágiles”. La versión en iberCaja de estas oficinas podrían ser las de “Atención Rápida” vinculadas a la creación de un MAP.

El acuerdo se puede resumir en que los empleados de 200 oficinas y otros 200 que desarrollan su trabajo en un denominado “proyecto multicanal” trabajaran hasta las 18:30, con una hora y media para comer, librando dos tardes rotativas a la semana; a cambio de 2.035 euros al año, 9 euros para comer, cuatro días de vacaciones y dos tardes adicionales libres.

¿Alguien se apunta?

El conflicto abierto en Bankia, desencadenado por la decisión unilateral de la empresa de abrir oficinas por las tardes y establecer horarios especiales para gestores, ha sido resuelto, en su primer capítulo, con un acuerdo que nos pone en la peor de las situaciones al resto del sector de cara a la negociación del convenio, ya complicada de por sí.

El segundo capítulo, el horario de los gestores, parece tomar una deriva tan preocupante o más que la anterior. Con la excusa de “flexibilizar” su horario, a todos ellos ya se les ha comunicado por escrito un “horario de referencia” que incluye la jornada de tarde, repitiendo el guion de política de hechos consumados que algunos sindicatos bendicen con un acuerdo.

Por si alguien tenía alguna duda de como desde las Direcciones de las entidades se pretender utilizar el concepto de “flexibilidad horaria”, este es un buen ejemplo No deja de ser curioso que, una entidad rescatada, sea el adalid de este proceso desregulador en el sector y que haya logrado contar con la inestimable ayuda de un sindicato, CCOO, mayoritario en dicha entidad y en el sector que, como viene siendo habitual, dice una cosa y a la hora de la verdad hace la contraria.

No podemos dejar de trasladaros nuestra preocupación ante esta situación que sin duda puede afectarnos a cualquiera de nosotros. Los votos depositados hace apenas unos meses hacia determinadas opciones parecen que se van a volver en nuestra contra.

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