COMPROMETIDOS

Algunos “responsables” de nuestra entidad, entienden su gestión de los recursos de la misma, como una continua presión INACEPTABLE sobre las oficinas (“si no estoy encima éstos se tocan los...”).

Estos “responsables” solicitan constantes COMPROMISOS DE VENTA de los distintos productos que comercializamos. Evidentemente, son perfectamente conscientes de la imposibilidad de saber cuál va a ser la decisión final del cliente en la adquisición de nuestro producto, pero a ellos LES DA IGUAL. Piensan que de esta forma “nos pondremos las pilas” y trabajaremos más. Pues no señores, esto solo sirve para CABREAR y DESANIMAR.

Igual piensan que no estamos ya bastante comprometidos en la defensa de nuestra Entidad en el escenario que nos estamos moviendo.

No deberíamos ser las oficinas las que tendríamos que explicar a los clientes que se tranquilicen, que no les hemos “colocado” preferentes.

Son ellos los que dejan con el “culo al aire” a las oficinas porque se ha acabado tal producto, o porque se ha decidido rebajar el tipo previamente negociado. Luego te piden cuentas si se llevan el dinero.

¿Dónde está el compromiso de esos “RESPONSABLES” con las

oficinas?

Que quede claro, y que sirva para siempre, el único compromiso que puede cumplir un compañero es el de HACER TODO LO POSIBLE POR INTENTAR VENDER UN PRODUCTO.

Todo lo demás solo puede resultar NOCIVO Y PERJUDICIAL, tanto para los compañeros como para la propia Entidad.

Otra vez nos piden que demos la talla. Pero enero no ha sido un buen mes. Y no ha sido por no haberse intentado en las oficinas, por no hacer lo que nos han dicho que hiciéramos.

Tampoco será porque no controlen lo que hacemos. Tenemos reportes diarios, semanales, por productos, por ofrecimientos, etc.. Casi ni queda tiempo para trabajar con tanto control. “Hay que hacer esto”.

Pero también lo otro, y además atender a los clientes. Todo es prioritario, pero sin definir un orden. Esto más que aquello.

¿Con qué medios contamos para conseguir todo lo que nos exigen? La valoración que hace la Dirección del Área de Negocio sobre la venta de viviendas la califica como “desastrosa” y tiene “la sensación de que estamos despistados”.

Y desatendidos. Sin medios, sin precios competitivos, pero exigiendo resultados. Multiplicar las acciones de control no multiplica las posibilidades de negocio. Quizás quienes no están comprometidos con iberCaja no son los empleados de las oficinas, y es necesario levantar la vista más arriba. ¿O alguien piensa que hay un solo empleado que no pretenda cerrar una oportunidad de negocio?

No somos párvulos, ya hemos demostrado que sabemos hacer nuestro trabajo. El que te recuerden constantemente con el látigo lo que debes hacer, solo logra que te desmoralices si no lo consigues. Y que sientas el aliento amenazante en el cogote solo sirve para crear temor, malestar, mal ambiente. Pero no que se firmen más contratos.

BASTA YA

Y SI NO SABEN AYUDAR..., AL MENOS…..NO ESTORBEN.

POR SUS SANTOS C.....

¿ Qué les pasa a algunos jefes de zona ?

No sabemos si tienen instrucciones superiores, lo que nos parecería lamentable, o son decisiones de “motu proprio”, lo que además sería indignante, pero la nueva práctica de los Directores de Zona de reducir las valoraciones de los directores en el “Sistema de Retribución Variable de Empleados” pone bien a las claras EN LAS MANOS DE QUIEN ESTAMOS.

Lo de las exigencias y malas formas ya viene de lejos, las muestras de nerviosismo a la hora de dirigirse a las oficinas empiezan a ser generalizadas pero que por sistema se reduzca una valoración dada por un denominado “cargo de confianza” es una PROVOCACIÓN.

Pero lo peor es que los responsables de semejante desaguisado se salten vilmente la normativa de nuestra entidad y justifiquen su actuación en base a que un empleado no puede ser valorado por encima de los puntos conseguidos por la oficina.

¡¡ CLAMA AL CIELO !!

Señores ILUMINADOS: el 50% de la retribución variable de los empleados ya está vinculada a los puntos obtenidos por la oficina, el otro 50% recoge aspectos CUALITATIVOS del día a día de las oficinas que desde los despachos de zona son totalmente inevaluables.

Y siguiendo con Normativa: “Con esta incorporación en el Sistema de Retribución Variable, se persigue no sólo recompensar el esfuerzo y aportación de todos y cada uno de los empleados que intervienen en el cumplimiento de los objetivos de una Oficina, sino también facilitar la integración, vinculación y participación de todos los miembros del equipo”. Se han leido al menos la Normativa.

Si tú estas luchando todo el año en las oficinas, con unos objetivos que ya sabemos todos como son, y a la hora de valorar tu trabajo llega un señor, que apenas te ha visto trabajar, y por sus santos c... reduce lo valorado por tu inmediato superior. ¿Cómo te vas a sentir?

Motivado para seguir defendiendo a nuestra entidad desde luego que no.

Ni siquiera es por el dinero, apenas unos cientos de euros, es por la BOFETADA MORAL que te dan con estas actuaciones.

Como siempre lo que debía servir para ANIMAR, por la actuación de algunos INEPTOS se convierte en otro instrumento de DESMOTIVACIÓN.

Lo dicho

EN ESTAS MANOS ESTAMOS.

UN TRABAJO DURO

Hay dos cajas, por lo menos: la que está de cara al público y la otra. La una, hasta director de oficina incluido, está, por obligación, con los pies en el suelo y viviendo de primera mano, la crisis que nos han creado. De la otra solamente sabemos de su existencia por la normativa, los emails pidiendo reports y las reuniones vespertinas, donde se hacen carne y hueso los emails, la normativa y lo que no puede salir “negrosobreblanco”: las amenazas, las sugerencias, las indirectas, las directas, etc., etc.,...

La una vive con el alma pendiente de un hilo y la otra... sujeta el hilo, o por lo menos eso se creen ellos.

Cuando hay un problema en la Red con un cliente, raro es que alguno de los que mandan emails y piden reports, den la cara por esa plantilla, y cuanto más peliagudo es el problema, menos dan la cara. Se han olvidado (memoria selectiva se llama), que ese problema, muy probablemente viene originado por el choque entre la realidad, la tozuda realidad, y alguna norma, algún email o lo dicho “sugerentemente” en alguna reunión.

Si el problema se acaba con la pérdida del cliente, es el menor de los males: unos se van y otros vienen. El propio sistema financiero es el que ha “espabilado” a la clientela; estando el mercado como está lo de las sonrisas y el trato de toda la vida, ya renta poco.

La situación se complica si el problema degenera en violencia contra los empleados. Normalmente empleados de la Red, o que están de cara al público. Nuestra recomendación es que nadie debe dar (o poner la cara) por una norma, un email o un jefe de zona diciendo tonterías: pellejo solamente tenemos uno.

Cuando una oficina tenga un problema con un cliente y vea que se le va de las manos, que no se coma el marrón en solitario. Correo a la superioridad, pero con una particularidad, f u n d a m e n t a l: COPIA, al responsable del departamento afectado y al jefe del jefe, porque siempre hay un jefe por encima, y así cuanta más gente sepa el problema mejor. Igual uno por otro, alguien echa una mano o dan una solución.

Y si quieres que te intentemos ayudar desde UGT, inclúyenos en COPIA OCULTA.

No os limitéis a decírselo al jefe de zona, eso da el resultado que da y todos tenemos experiencias al respecto.

Si el problema adquiere tintes de peligro físico, con mayor razón, copia urbi et orbe (a todos en todos los sitios): Desahucios, morosidad, actitud violenta de un cliente concreto, etc., etc., etc.,...

Jugarte el pellejo en el andamio, en la cadena de montaje o en la mina va de lo suyo. Pero que te rayen (como mal menor) el coche, que te achuchen física o verbalmente a la entrada o a la salida de la oficina, o dentro de la oficina, por cumplir normas impuestas y muchas veces nada razonables, tiene que ser un riesgo a repartir, no solamente que se lo coman los que están a pie de calle.

En UGT, siempre que los compañeros nos avisen, estamos dispuestos a compartir y solidarizarnos físicamente con esas situaciones violentas y nos ponemos a su disposición, tanto nuestros delegados como nuestro servicios jurídicos para lo que haga falta.