DIOS MÍO....¡¡¡ LAS VACACIONES !!!

La política de recursos humanos que la crisis ha creado y que la Dirección no
combate con alguna medida imaginativa, origina que la plantilla en la Red esté
infradimensionada.

Parece que la solución a todos nuestros problemas será la integración con Caja3 en
el próximo otoño,... o invierno. Dicen las paredes que las cosas no van lo bien que
dicen, los comunicadores oficiales a bombo y platillo, siempre que pueden.

Y hasta que llegue el big bang tenemos otro verano de por medio. Con otro ERE que
aplicar, sin sustituir bajas por enfermedad, sin refuerzos de vacaciones y con la
plantilla que tiene derecho a disfrutar de sus vacaciones.

Unos tienen derecho a disfrutarlas y otros tienen derecho a NO sufrirlas.

Unas oficinas, que en su mayoría están con falta de plantilla, ya de natural, ahora
aparte de “darse” a si mismas las vacaciones, osea “ya te apañaras... pero ¿dónde
está el reporting de las 9 de la mañana?”, corren el riesgo de tener que hacer el
“favor” de apoyar a otras oficinas que estén peor.

Y la cosa roza el esperpento, cuando ya ni siquiera son los DZ los que hacen las
gestiones, tiene que ser la propia oficina la que tire de “amistades” o de “favores” para
conseguir que la oficina de al lado le preste un empleado... ¿dos días? ¿tres?
Y se tira de buena voluntad, y se tira de compañerismo y de repartir la miseria, pero...
¿cuándo un DZ es capaz de decir que las vacaciones no son excusa para el
cumplimiento de los “compromisos” convertidos en “obligaciones”? ¿Se da cuenta el
DZ de que las personas tienen un límite? Y el sentido común, también.

Este va a ser otra vez un verano de locos, seguido de un otoño/invierno de...
¿pánico?.

Alguien debería poner sentido común en la gestión de recursos humanos. Y ya
sabemos que con las experiencias pasadas estamos pidiendo un esfuerzo
¿extraordinario?.

Y si hay que contratar gente este verano, todos ganaremos. Hasta iberCaja Banco
como entidad, por servicio y por imagen Aunque le cueste alguna perra, cosa que
este año, por lo que nos dicen de los números, no debería ser problema.

Y si no luego, no nos extrañemos de que las personas caigan enfermas, como ya
está pasando con algunos responsables en área técnicas.

Porque por mucho que empujen o insistan los que se acaban poniendo las medallas,
los curritos, por defecto de fabricación ya irreparable, solo tenemos dos manos y una
cabeza.