viernes, 9 de enero de 2009

LOS DE CASA, LOS PRIMEROS


Este dicho define perfectamente como va a enfocar nuestra Dirección su política de gastos para el próximo año. Hay que recortar.

Y es que toca apretarse el cinturón, y, hasta ponerse tirantes, parece que vamos a empezar por lo que mejor conocemos, lo más cercano, la gente que trabaja en esta empresa. Ya se sabe:”Tacita a tacita” podemos maquillar la cuenta de resultados.

“Vienen tiempos difíciles”, “Hace falta tener flexibilidad” “Tendremos que hacer sacrificios” son frases, que a la vez que tópicas, se vienen trasmitiendo a la plantilla. Se esta creando un clima, y una predisposición a realizar esfuerzos, que tendremos que hacer todos.

Las palabras de agradecimiento, probablemente, aparecerán en todos los discursos y notas de prensa. Volverá la frase “el mejor activo de la Caja”. Pero hay otro refrán que dice: “mucho te quiero perrito, pero pan poquito”.
 

Desde UGT solicitamos que se aplicase para los préstamos de empleados como fecha de revisión diciembre, más favorable que la que se emplea según convenio (octubre) puesto que los últimos meses se ha producido una importante bajada. Era anticipar que, durante seis meses, hasta la próxima revisión, los empleados disfrutasen de alrededor de 1,79% menos en el pago de sus prestamos. Nos consta que no hemos sido los únicos en solicitarlo.

Pero la respuesta ha sido “NO”. ¿Tan necesitada esta iberCaja para no poder prescindir durante seis meses del cobro de una parte de intereses a sus empleados? ¿Qué respuesta esperan recibir cuando les soliciten esfuerzos suplementarios? El refranero también dice: “Donde no hay harina, todo es mohína”.

¿Qué será lo siguiente? ¿Nos pedirán devolver lo cobrado a cuenta de salarios ahora que la inflación anual va a ser inferior al 2%?. Durante todo el año los precios han sido de millón, se ha pagado el pollo como cordero, el pan como bollería, y la gasolina como viajes espaciales.

Ahora, con el temor a la crisis, hemos echado mano al bolsillo para sujetárnoslo, se ha realizado un parón del consumo, y la necesidad de vender ha hecho que se desplomen los precios.

¿Pedirán explicaciones del gasto de luz en las oficinas?¿De la calefacción? ¿Volverán los tiempos de pasar en el kilometraje solo la ida?

La reducción de gastos ya empieza a afectar a la imagen de las oficinas. Resulta chocante ver discutir a las limpiadoras porque las empresas adjudicatarias de las contratas no quieren dejarles todos los productos que solicitan. Si este primer mes ya no les dejan ni mopa, ni amoniaco, ni limpiador de muebles..., no queremos ni pensar como, ni con qué, limpiaran en noviembre, cuando hayan agotado el presupuesto.

VEREMOS SI EL CONTROL DEL GASTO SE APLICA A TODOS LOS NIVELES.

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