Nos costó, a los sindicatos, mucho pedir y mucho razonar, el conseguir que cerrásemos al público a las 14 horas. Es el horario de la inmensa mayoría de las entidades financieras del país, porque a pesar de losmercados, del BCE, del FMI y demás cuadrilla, en España, de momento, a las dos la inmensa mayoría de la población trabajadora está comiendo en su casa.
Pensábamos y argumentábamos que ese tiempo, debería aprovecharse para esas faenas, que sin público delante, ayudarían a evitar la prolongación de jornada o incluso las invitaciones a las agradables y provechosas jornadas vespertinas para formación, información, seguimientos y los demás inventos modernos, incluidos el reporting.
Pero regularmente nos llegan llamadas de auxilio de compañeros que siguen viendo como su jefe de 2 a 3 se dedica a sus reporting y demás... pero que ve imprescindible, de vez en cuando put... una tarde al personal.
Llamar en esa hora para ofrecer productos a clientes que están hasta el gorro de ofertas y además, casi seguro comiendo en familia, es una mala idea, por mucho que se empeñen algunos. Y en cambio sería una gran idea que en vez de hacer desplazarse a la gente a la oficina por las tardes para... nada o casi nada, esa hora se dedicará a esas reuniones de información, planes de acción, seguimientos y perseguimientos, a las cuales tan aficionados son de ordenar los directivos de la Red.
Debe ser que “viste” más ante el jefe que el reporting que le mandes ponga que la reunión ha sido de 17 a 20, y “demuestres” vinculación y compromiso, a expensas de tu familia o de tu tiempo libre, y de la familia y el tiempo libre de los demás, que si el mismo papelico se hubiera hecho por la mañana.
Eso si, nadie habla de compensaciones, de horas extras,... Los cargos directivos cuando piden una vacante ya saben que ponen su vida, y su tiempo libre, en manos del jefe de zona: son “cargos de confianza”. Pero la suya, no la de los demás.
Habrá gente en la plantilla, mucha, que igual en su día se planteó ser cargo directivo y al verle las orejas al lobo, dijo mejor no, que tener las tardes libres para la familia, las aficiones, el estudio o el paseo me compensa más.
Porque a pesar de la que está cayendo, TODAVÍA el convenio dice que por las tardes, menos las consabidas de los jueves de invierno, nastis de nastis.
Así que si alguien, o muchos, quieren regalarle a la empresa sus tardes libres, allá ellos. Pero si alguno, o muchos, quieren que se les respete el horario de convenio, cuando se les requiera, o “invite”, a trabajar por las tardes, recuérdese que eso es voluntario y, sin excusa, debe ser pagado.
No vaya a ser que algunos se pasen la mañana “tomando” café y luego tengan que “recuperar” por las tardes, o usen de excusa al jefe de zona, para evitarse estar en casa. Que de todo hay en la viña del Señor.
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